El lado bestia de Transformers: Beast Wars

El eco del rugido de las bestias llega al Garage!
Como fue prometido en la columna realizada en Radio Universo Retro, en la medida de lo posible iré publicando notas complementarias al tema tratado en el programa de radio, en un esfuerzo por unificar la columna del programa y el blog a través de su contenido, a la vez que ahondar un poco más en los temas (ya que el tiempo al aire no siempre alcanza para explayarse tanto como uno quisiera)
.
En fin, como ya habrán adivinado en mi debut en el programa hablé nada más ni nada menos que sobre Beast Wars, así que aquí vamos!

Un poco de background:

Corría el año 1996, tenía 10 años y recuerdo haber encendido la TV en mi habitación un sábado por la mañana y enganchar en el HBO el capítulo a medio empezar de una serie nueva. La animación era hecha totalmente en CGI (algo inédito para la época) y me cautivó instantáneamente, pero había algo raro… el capítulo comenzaba con una batalla entre las naves de dos bandos de robots que terminaban estrellándose en lo que parecía ser la Tierra prehistórica. La historia resultaba conocida, pero muchas de las series de los ’80 y ’90 partían de una base similar, podía llegar a ser casualidad, no? O al menos eso pensaba, hasta que aparecen los líderes de ambos bandos, que no solo se parecían al héroe y villano de mi serie preferida, sino que encima tenían los mismos nombres: Optimus y Megatron… Plagio pensé! Y peor aún, eran robots transformables también, aunque en vez de convertirse en vehículos se transformaban en animales… qué carajos?!
Ese fue mi primer encuentro con Beast Wars, que recién cuando ví el segundo capítulo a la semana siguiente descubrí al poder ver su opening que la serie no era un plagio, sino que efectivamente estaba relacionada con Transformers… lo cual no fue menos bizarro y chocante, pero gratificante gracias a lo entretenida que era.
Así de un sopapo Beast Wars cambiaba todas las reglas del juego y lentamente hacía lo impensable: rescataba a Transformers de lo que pudo haber sido su perdición en el olvido.

Qué?! Cómo que RESCATABA a TF del olvido???

La serie:
Bueno, resulta que en el periodo de 1993 a 1994 en el que se dio lo que conocemos como Generación 2 las ventas decayeron enormemente, y por primera vez desde su nacimiento en 1984 la franquicia estaba al borde de la extinción. Para revitalizar a Transformers Hasbro le encargó a la recientemente absorbida Kenner reinventar la franquicia para levantar las ventas. Y vaya que lo hicieron! Le dieron una vuelta de rosca completamente inesperada al cambiar el look cuadrado y robótico clásico por diseños más orgánicos y estilizados, pasando de vehículos a animales.

Se lanza la nueva línea al mercado a través de un doblepack  que incluía un comic introductorio. En este comic se introduce a Optimus como un muciélago y Megatron como un  cocodrilo, explicando que eran los líderes clásicos adoptando nuevos cuerpos y modos alternos en lo que sería una nueva etapa de la interminable guerra entre sus bandos.

Además de este comic, se lanza una serie animada a cargo de la empresa canadiense Mainframe Entertainment. Los dos editores a cargo, Bob Forward y Larry Ditrillio deciden descartar la historia del mini-comic y encarar el proyecto con una perspectiva totalmente distinta, distanciándose lo más posible de G1 para así poder gozar de una mayor libertad creativa.
Así es como al principio de la serie los nexos a G1 son vagos y muy básicos, revelándonos de a poco  pequeños detalles que nos ayudan a establecer esa conexión, contándonos por ejemplo que la serie se sitúa muchos años después de G1, donde los  Maximales y los Predacones son los descendientes de los Autobots y Decepticons y fueron a parar a la Tierra prehistórica por accidente al atravesar un vórtice de tiempo en pleno enfrentamiento.

Sin muchas más explicaciones, la serie se concentra en la exploración de este nuevo mundo y el desarrollo de sus personajes a lo largo de argumentos muy bien planeados, con los toques justos de humor y acción, y tramas que lentamente iban presentando una complejidad inesperada.
Al igual que las películas de Michael Bay, Beast Wars polarizó al público, dividiendo aguas entre los más tradicionalistas y aquellos de mente más abierta. Sin embargo, a diferencia de Bay, Beast Wars lentamente se ganó al público gracias a la calidad de su contenido.

Parte de este recibimiento positivo se reflejó en el feedback por parte de los fans, quienes no tardaron en expresar su opinión en el rudimentario internet de aquellas épocas.
Irónicamente fue el mismo distanciamiento a G1 que tomaron Forward y Ditrillio lo que generó que los fans rogaran por que se explore aquella conexión con G1, por lo que ni lentos ni perezosos comprendieron cual sería el mejor rumbo para la serie, y a partir de la segunda temporada de Beast Wars ese vínculo con su predecesora se iría reforzando de tal manera que uno de los plots más decisivos de la serie giró en torno a la lucha de los Maximales por evitar que los Predacones invadieran el Ark (la nave donde llegaron los Transformers originales a la Tierra) para destruir a Optimus Prime y cambiar el curso de la Gran Guerra Autobot-Decepticon.

El éxito de Beast Wars fue tal que animó a Takara a lanzar sus series paralelas tras la emisión de la primera temporada en Japón, optando por animación clásica al estilo del anime en lugar de CG, y dándole un tono más infantil que la BW Occidental.
De esa forma nacen Beast Wars II y Beast Wars Neo, contando historias totalmente nuevas, protagonizadas por su propio cast de personajes, tras las cuales retomarían la emisión de BW Occidental al emitir su segunda y tercera temporadas fusionadas bajo el nombre Beast Wars Metals.

Beast Wars II

Beast Wars Neo

Volviendo a occidente, luego del cierre de la tercer temporada de Beast Wars se estrenaría Beast Machines, trasladando la acción de nuevo cybertron y dándole un nuevo giro estético, adoptando diseños súper estilizados  con la temática de “tecno-orgánica” para los Maximales, y regresando a algo más tradicional, pero mucho más mecánico para las legiones de Vehicons.

Beast Machines

Las Figuras:
Las innovaciones de Beast Wars no residen solo en su ficción, sino que también revolucionó a través de sus figuras. Con Beast Wars llegó la utilización masiva de las famosísimas aticulaciones de balljoint. Esto se traduce en un nivel de posabilidad sin precedentes en el mundo de Transformers.
Otra innovación fue que los accesorios y armas de cada figura pudieran ser integrados en los modos alternos, lo cual era una habilidad que las figuras de G2 tímidamente habían explorado.
Con esta línea de juguetes también se comenzó a utilizar un sistema de precios basado en la clasificación por tamaño/escala (basics, deluxe, mega y ultra). 

Si bien Kenner lanzó al mercado a Beast Wars, Hasbro (habiendo recobrado la confianza en la fanquicia) vuelve a tomar las riendas a partir de las figuras de la segunda temporada de BW.

Para mantener fresca a la línea y no perder la atención de los compradores se introdujo el concepto de los Transmetals, donde a causa de eventos de la serie la mayoría de los personajes mutaban y sus cuerpos ahora revelaban una mezcla de piezas orgánicas y mecánicas por igual, lo cual obviamente se trasladó a las figuras, junto con el uso de piezas cromadas en sus figuras. También se introdujeron a los Fuzors, cuyos modos alternos eran la fusión de una o más bestias, entre otros cuantos cambios e innovaciones. 

Por su parte las líneas de figuras de las BW niponas introdujeron todo un batallón de nuevos personajes y sus respectivas figuras, si bien la gran mayoría nunca vio la luz en occidente.

Con el paso a Beast Machines podríamos decir que surgió el primer tropiezo en mucho tiempo, dado que al gusto del público general las figuras se tornaron mucho menos atractivas (mayormente debido a la imposibilidad de reproducir fielmente los diseños tan estrafalarios de la serie con la tecnología de ese momento), además de que en esta línea se perdería toda relación de escala entre los personajes y sus contrapartes animadas.

El Legado:

Podríamos decir que el mayor legado de Beast Wars es el simple hecho de que sigamos disfrutando de Transformers hoy en día, ya que cumplió (y con creces) su misión de salvar la franquicia de su inminente cancelación.

Beast Wars fue tan bien lograda que se ganó un aprecio enorme por parte del fandom, siendo considerada tan o más importante que G1 , siendo aún hoy la preferida de muchos.

Pasando a un aspecto más tangible, en lo que a plástico se refiere, las figuras de BW sentaron la base en términos de articulación y nivel de detalle por las que se regirían las líneas venideras, a la vez que varias de sus figuras vieron su relanzamientos en versiones conmemorativas, sets exclusivos de Botcon y TFCC, así como nuevas representaciones a través de figuras totalmente nuevas en otras líneas de figuras de TF.

Por otro lado, el concepto de las “bestias” y su estética fueron  homenajeadas múltiples veces: desde la reutilización de varias figuras en Transformers Robots in Disguise/Car Robots, el homenaje a través de personajes como Blackarachnia de Transformers Animated o Airachnid y los Predacons de Transformers Prime, la incorporación de reinterpretaciones de personajes de BW en los comics modernos, y así hasta el rumor sobre la posibilidad de llevar la guerra de bestias al nuevo universo cinematográfico de Transformers que Paramount y Hasbro están barajando.

No cabe duda alguna que más Beast Wars es palabra mayor dentro de la mitología e historia de Transformers, y si bien aún es considerada polémica por el cambio que introdujo a la franquicia, sigue siendo hoy una de las mejores sagas que ofreció TF, tanto por sus personajes y tramas memorables, así también por todo lo introducido por su línea de juguetes.

Tuviste la suerte de disfrutar de esta serie en las épocas de su transmisón? Cual fue tu primer impresión ante semejamte cambio?

Gracias por su lectura y hasta la próxima entrada del blog!